Gato persa, curiosidades y cuidados
El gato persa es una de las razas de gatos más populares a nivel mundial. De apariencia elegante y señorial, los gatos persa son cariñosos, tranquilos y dóciles. Ideales para vivir en familia y con niños en casa.
Al gato persa gustan las caricias y es muy hogareño. Otra de las características diferenciales de esta raza de gatos es que son muy presumidos y perezosos, por lo que pasan buena parte del día durmiendo.
Por todo esto, es una raza ideal para personas que tienen un gato por primera vez y para familias con niños en casa. No son nada independientes por lo que demandan compañía y atención de forma continua.
El gato persa suele tener un tamaño mediano y largo y abundante pelaje.
Su pelo es sedoso y puede ser de diferentes colores: blanco, dorado, chocolate…
Su cola es redonda y con bastante pelo en su punta. Sus orejas son pequeñas y redondeadas y sus ojos muy grandes y de color intenso
El gato persa puede vivir entre 12 y 15 años, llegando a los 20 años en algunos casos.
Estos gatos tienen tendencia al sobrepeso, por lo que es importante vigilar su alimentación.
La raza tiene tendencia también a tener quistes en los riñones, que provocan insuficiencia renal. Por esto es de vital importancia seguir las revisiones veterinarias para poder realizar un diagnóstico precoz.
Cuidados especiales para el gato persa
El pelaje del gato persa hace que requiera de bastantes cuidados
- Cepilla su pelo una vez al día con un peine de metal con púas redondeadas
- Limpia sus oídos con un algodón húmedo por lo menos una vez por semana.
- También es importante vigilar la limpieza de sus ojos usando una gasa o un disco de algodón
- Báñalo con regularidad (cada dos semanas). Puedes utilizar champús en seco que no necesitan aclarado, y hacen el proceso menos traumático para el gato.
- Después de bañarlo sécalo suavemente con una toalla frotando a favor y en contra del pelaje
Curiosidades
El nombre de la raza se debe a que fueron llevados a Italia desde Persia (actual Irán) en 1620 por un noble italiano que quedó fascinado por su belleza. Históricamente se les ha asociado al lujo y a la aristocracia.
Otros viajeros llevaron los gatos persas y de Angora a Francia y luego a Inglaterra, haciendo que se llamarán «gatos franceses» durante años.
El 75% de los gatos de pedigree registrados son gatos persa.